Villafranca, Villanueva, el paredón, barranco del Aulencia

Ruta realizada el Jueves 07/11/2019

Dificultad Física
Dificultad Técnica
40.9 km
786 m
21 Km Distancia Madrid
6h12'
3h23'
Características Terreno No hay información sobre el terreno

Participantes: Alfredo, Domingo, Juanlu, Pepe

Mas detalle ruta

Temperatura media: 13.1
Descarga ruta: villafranca-del-castillo-villanueva-del-pardillo-el-paredon.gpx

Día gris, viento, sensación térmica mucho más fría de lo que indica el mercurio y una ruta mucho más exigente de lo que anuncia el track.

Lo único cómodo ha sido el no madrugar. Arrancamos desde muy cerca de Madrid a eso de las 10:30, bueno un poco más, porque se nos ocurren un montón de cosas que contarnos para ponernos al día.

Qué salida tan bonita, qué agradable cruzar la urba de superpijos y enlazar con un caminito de diseño junto al arroyo de Los Palacios, con sus praderas verdes, bancos nuevos de granito y un surtido de árboles otoñando. Los nenes de la Camilo José Cela no tienen nada que envidiar a los americanos de las pelis.

Eso sí, es cruzar V. del Pardillo y darte cuenta de que los pardillos somos nosotros. Hace un viento que te mueve la rueda delantera, el trazado se separa del curso de agua y la pendiente se va acentuando con su vientecito en contra.

Llegamos y bordeamos la urbanización de “las cuestas” ¿hay que explicarlo? Pues eso. Aquí el monte nos regala unos cuantos repechos de esos que no suman metros prácticamente, pero que joden.

Paisaje de dehesa solitario, muy bonito, hasta llegar a una colonia al SE de Colmenarejo. Más Chalés grandes, un poco descabalados. Con el viento y el cielo gris dan una imagen inhóspita. Vivir aquí debe ser muy tranquilo, como en cualquier cementerio.

El monasterio y Abantos

Estamos en el punto más alto de la ruta. La vista de El Escorial y Abantos desde aquí es formidable. Da el sol en el monasterio y desde la sombra de la nube que nos cubre se aprecia en todo su esplendor ¿a que queda cursi? Hemos hecho ya más de la mitad del desnivel. Ahora solo tenemos que cubrir la segunda parte con tranquilidad (y frío).

Mina Antigua Pilar

Pasamos por las ruinas del caserón del Quincho, luego los restos de la mina de cobre. Una zona de extracción de mineral que estuvo en funcionamiento hasta el S XIX. Hay galerías profundas que apreciamos por el dibujo de la entrada. La zona está vallada y solo son visibles un par de arcos en ruinas. Ruinas que aprovechamos para comernos el plátano resguardados del viento. La temperatura no sube, baja.

Nos separamos un poco de la zona montañosa, buscando el río Aulencia, afluente del Guadarrama. Qué bien otro paseíto como el inicio al lado del río ¡y una buena polla! Desde la presa vieja del Aulencia nos metemos en un barrancazo profundo y cerrado como el chocho de una opusina. Vamos, que me lo empujo entero (Alfredo no) y son varios kilómetros.

Presa Aulencia

Para salir del barranco nos comemos una pared de esas que no sabes si abandonar la bici y que te la lleven los de Glovo. Bueno, vale, ya está, ya pasó… Solo te queda bordear una finca y cruzar el barranco por encima de un antiguo viaducto. 60 cm de ancho y 20mts de caída, durante unos 50 mts de longitud. No, Alfredo no pasa montado…

Ahora sí, ahora enfilamos al restaurante. Tarde y con mucha hambre nos presentamos el “Al plato María” donde Domingo a reservado y avisado que vamos con bicis. Llegamos y el tabernero de diseño pretende que comamos en la terraza, con un frío de la hostia. Viendo que no cuela, nos mira con recelo y consiente en atendernos junto a la gente de bien, pidiendo por favor que no le manchemos las sillas, que son de tela y que entendamos que no es un club deportivo, que ellos cuidan la imagen y la decoración. Me vuelvo y le enseño el culo, para que vea que no llevo barro ¡será gilipollas!

Eso sí, la comida excelente. Alfredo revive su afair con las judías -esta vez son alubias con setas- y ayuda a finalizar la ración de Domingo, más el puchero que compartíamos amorosamente Juan Luís y yo. Después secreto ibérico y entraña a la plancha con chimichurri. Un par de postres y los cafés para acompañar los comentarios de la jornada.

bonito gesto de los compañeros formando la enseña nacional para empatizar con los comensales

El paisaje precioso, la ruta más seria de lo que parece y el día perfecto. Esta zona es una alternativa semejante a Tres Cantos, El Molar o Colmenar.

La sensación de terminar de comer después de una ruta de jueves no tiene precio. Es un momento de tranquilidad, relajo, caras felices. Una sensación de despreocupación total que se acrecienta con el recuerdo de nuestros queridos compañeros, entregados a sus quehaceres, calentitos en sus puestos de trabajo. Vaya desde aquí un cariñoso abrazo para todos ellos.

Otras fotos: Link Álbum

Visionar fotos y videos del Álbum de Google en el mapa: ver fotos

Pepe Montalvo

Pepe Montalvo

Listo, guapo, deportista y, sobre todo, humilde.


3 comentarios en “Villafranca, Villanueva, el paredón, barranco del Aulencia”

  1. Deberíamos haber dicho al tabernero que estaba en presencia del Marques de Toril. Seguro que nos hubiera tratado mejor.

    Un rutita dura con el viento de cara como es habitual.

    1. Muy buena crónica. De mayor quiero una bici que lleve el viento de popa. Juan, por favor, mírame en Wallapop una que esté bien de precio

Los comentarios están cerrados.